Los colaboradores de Coincidir
dejan salir su voz, su grito interior
que les permite alejarse del anónimato cotidiano,
deciden que la pluma
y la palabra les represente una veta
inacabable de sensaciones,
consienten en acercarse a todos
y a cada uno de nosotros,
con una única intención:
dejarnos saber que están ahí.
Agustín Chuc